jueves, 29 de septiembre de 2016

Camarones danzantes










Los camarones son exquisitos, pero los tailandeses dicen cocinarlos del modo más exótico. ¿Cómo? los comen vivos, recién sacados del lago. Una vez en la boca los mastican rápidamente para que no bailen en el paladar.









Cabezas de cocodrilo









En ciertas provincias de China destacan por los gustos exóticos en la comida. Un ejemplo es la cabeza de cocodrilo en salsa dulce, platillo que incluso ha competido en ciertos concursos gastronómicos de ese país.







Tarántulas fritas









Entre todos los insectos que disfrutan los camboyanos, el más exótico y preciado es la tarántula. Se fríen con ajo y hierbas y las sirven en bandejas de madera. Es común que las vendan en las carreteras que llevan a los templos milenarios por medio dólar cada una.







Vino de ratitas








Parece terrible, pero es un tónico revitalizante tradicional de China y de Corea. Lo hacen poniendo pequeñas ratitas dentro de una botella para luego cubrirlas con vino de arroz y dejar fermentar. 

Quienes lo prueban dicen que es una dosis de energía sin igual, aunque lo bastante exótico para no sentirse incómodo al probarlo.





Lutefisk







Si vas a los países nórdicos seguramente probarás el Lutefisk, un exótico platillo de pescados blancos secos (especialmente el bacalao) preparados con soda y con un tratamiento bastante particular. Se trata de una comida con textura gelatinosa algo corrosiva, pero es un must si vas por aquellos rumbos.



EXQUISITO!!